Edwin Delgado es ingeniero en Electrónica con una trayectoria de 25 años laborando en Ingenio La Unión en el área de Automatización. Cuando el Covid-19 llegó a Guatemala, se observó la necesidad de tener ventiladores específicamente para las salas de cuidados intensivos.
Debido a su conocimiento y experiencia, recibió invitaciones para crear nuevas propuestas de modelos de respiradores, los diseños eran buenos y funcionales para etapas previas, pero no eran lo que requería un paciente con problemas respiratorios más complejos que requieren ser entubados a un sistema mecánico, que provea la dosificación de aire y oxígeno necesarios al paciente dependiendo de su condición y edad. Edwin junto a un grupo de profesionales iniciaron con la idea de la creación del ventilador.
Asistió a las presentaciones de proyectos relacionados por parte del Gobierno de Guatemala en el Parque de la Industria. Y se consultó con la Gerencia General de Ingenio La Unión sobre su postura ante el proyecto antes de presentarlo en dicho evento, iniciativa que el Gerente General Alvaro Enrique Ruiz no dudo en apoyar. El día del evento llegó y Edwin presentó el modelo, diagramas y presupuesto al presidente Doctor Alejandro Giammattei y ministros de la República de Guatemala, el presidente, quien es conocedor de estos equipos, no dudó en que el modelo se lograría y funcionaría por lo que optó en apoyar inmediatamente la propuesta.
El Gobierno de Guatemala apoyo con la compra de 64 Válvulas inspiratorias, alemanas, únicas en su existencia. Debido a la demanda mundial para la manufactura de estos equipos, Edwin tuvo que presentar al proveedor Alemán el proyecto y demostrar que funcionaría, logrando que fueran asignadas a Guatemala sobre la solicitud de otros países. Cuando las válvulas llegaron, el presidente de la República Doctor Alejandro Giammattei anunció de manera oficial a nivel nacional la entrega a Ingenio La Unión y el apoyo de la Agroindustria Azucarera, quienes iniciarían el proyecto.
Una vez aprobado el proyecto por las autoridades de Ingenio La Unión y del Gobierno de Guatemala, se inició la planificación con los equipos de trabajo del ingenio para organizar todas las labores de la parte mecánica, electrónica, de diseño y programación que se requerían. También sostuvo reuniones con médicos como el doctor Willy Menéndez Nieves, Jefe del departamento de Pediatría del Hospital Nacional Regional de Escuintla y neumólogos que le asesoraron para que el prototipo cumpliera con las bases y funciones de un ventilador formal.
Para dar inicio al respirador, se creó la maqueta en un tablero para las pruebas de su funcionamiento y así comenzar a realizar el primer prototipo.
Se realizó una reunión con los representantes de los Ingenios por parte de Asazgua, para presentarles el proyecto y el funcionamiento del ventilador, una vez validado por los profesionales se distribuyó el trabajo y partes del equipo que conformarían el primer prototipo para así agilizar su manufactura.
Cuando cada ingenio entregó los elementos designados se procedió a ensamblarlos, para realizar las pruebas de funcionamiento y diseño. Al tenerlo, fue difícil volver a distribuir las labores, debido a que se debía trabajar sobre el prototipo con las piezas unidas. Por lo que Edwin puso manos a la obra con los profesionales del ingenio liderados por él. Se cotizaron y eligieron a los mejores proveedores de insumos, se realizaron adaptaciones, cambios, simplificaciones y mejoras, realizando las diversas labores de manufactura, rediseño, creación y ensamblaje de piezas, la programación del sistema y pruebas para asegurarse del correcto funcionamiento del aparato.
Proveedores de insumos apoyaron en facilitar el envío de partes y elementos del extranjero. Asazgua aportó 89 válvulas piezo-cerámicas adicionales de las 64 que el Gobierno de Guatemala proporcionó.
El ventilador requiere 3 de estas válvulas, por lo que será posible construir 50 ventiladores, los cuales contarán con la tecnología y sistemas de seguridad para garantizar el correcto funcionamiento.
“No solo en Guatemala sino en el mundo hay escases de ventiladores y haber diseñado y creado un prototipo que funciona, permitirá abastecernos ante una necesidad, además este tiene un costo aproximado de un octavo del precio normal en el mercado.”
La noticia del proyecto fue difundida rápidamente y llegó a muchos grupos, instituciones y proveedores que se interesaban por contribuir a esta buena causa para salvar vidas. Entre estos grupos se encuentran el Intecap, el Ejército de Guatemala, Fogel de Centroamérica.
“Dios en el camino te hace pasar cosas para lograr hacer otras en el futuro”
Edwin nunca se imaginó estar liderando y ejecutando un proyecto como este, comparte que no lo hace con afán de fama o dinero, su objetivo es hacer llegar esta ayuda a quienes lo necesitan, aprovechando la oportunidad que tuvo de estudiar y convertirse en profesional, desarrollando sus conocimientos en electrónica y programación durante estos 35 años, experiencia en conjunto con la de su equipo de trabajo para poder realizar este proyecto. Edwin se encuentra muy agradecido de haber recibido todo el apoyo y sobre todo la confianza por parte de todos los equipos, personas y directivos que se sumaron de una u otra manera a su causa, así que asegura que será un sistema que trabajará muy bien y dará buenos resultados.
Luego con este proyecto, tuvo la oportunidad de visitar la sala de emergencias y pediatría del Hospital de Escuintla, que por lo general se encuentra llena de niños utilizando estas máquinas y otros esperando que una se desocupe para tener la oportunidad de vivir.
Se espera que después de la pandemia, estos ventiladores sigan al servicio de estos niños y personas que lo necesitan. “Un ventilador no asegura que la persona vivirá, pero le da una oportunidad de vivir a una persona que lo necesita y esperanza a sus seres amados.
La labor para desarrollar este proyecto llevó aproximadamente 4 meses desde su planificación en marzo hasta la fecha de la muestra del prototipo el 22 de julio en el Palacio Nacional, lugar donde se presentó al Presidente de la República Doctor Alejandro Giammattei a Joaquín 1.0 el primer ventilador mecánico hecho en toda Centroamérica.
“En honor y memoria de su angelito Joaquincito”
Dios Bendiga a Edwin y su familia por este legado que ha construido, es una historia que vale la pena volver a contar.